WASHINGTON.-La crisis por el cierre del gobierno en Washington llega a un punto crítico el sábado debido a que el programa federal de asistencia alimentaria SNAP enfrenta retrasos y, además, millones de estadounidenses están a punto de ver un aumento dramático en sus facturas médicas.
Los impactos en las necesidades básicas —alimentos y atención médica— subrayaron cómo la falta de un acuerdo entre los legisladores sobre un proyecto de presupuesto está afectando a los hogares en todo Estados Unidos.
Jueces federales frustraron los planes del gobierno de Trump de congelar los pagos al Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP) el sábado, pero el retraso en la entrega de las ayudas probablemente dejará a millones de personas con dificultades para pagar su despensa.
¿Por qué este cierre del gobierno es histórico?
Todo esto se suma a la tensión en el país, mientras el sábado se cumple un mes de que los trabajadores federales no reciben su sueldo, lo cual incluso afecta los viajes debido a la falta de controladores aéreos.
El cese de funciones debido a la falta de financiamiento ya es el segundo más largo de la historia, sin embargo, había poca urgencia en Washington para ponerle fin, con los legisladores fuera del Capitolio y ambos partidos atrincherados en sus posiciones.
La Cámara de Representantes no se ha reunido para asuntos legislativos en más de seis semanas, mientras que el líder de la mayoría del Senado, el republicano John Thune, de Dakota del Sur, cerró su cámara para el fin de semana después de que las conversaciones bipartidistas no lograron un progreso significativo.
Thune expresó que espera “que la presión comience a intensificarse y que las consecuencias de mantener el gobierno cerrado se vuelvan aún más reales para todos, de modo que expresen, con suerte, un nuevo interés en tratar de encontrar un camino a seguir”.
El estancamiento parece cada vez más insostenible a medida que el presidente republicano Donald Trump exige acción y los líderes demócratas advierten que un clamor por el aumento de los costos del seguro de salud obligará al Congreso a actuar.
“Este fin de semana, los estadounidenses enfrentan una crisis de atención médica sin precedentes en los tiempos modernos”, afirmó esta semana el líder demócrata del Senado, Chuck Schumer, de Nueva York.
¿Qué va a pasar con el programa de cupones de alimentos SNAP?
El Departamento de Agricultura (USDA) planeaba retener los pagos al programa alimentario SNAP a partir del sábado hasta que dos jueces federales ordenaron al gobierno que los realizara.
Trump dijo que proporcionaría el dinero, pero quería más indicaciones de la corte, lo cual sucederá hasta el lunes.
El programa atiende a aproximadamente uno de cada ocho estadounidenses y cuesta $8,000 millones mensuales. Los jueces acordaron que el USDA necesitaba al menos recurrir a un fondo de contingencia de aproximadamente $5,000 millones para mantener el programa en funcionamiento. Pero eso dejó cierta incertidumbre sobre si el departamento usaría dinero adicional o solo proporcionaría beneficios parciales para el mes.
De por sí, las ayudas se retrasarán porque en muchos estados se tarda una semana o más en cargar las tarjetas SNAP.
¿Qué va a pasar con los subsidios de atención médica que expiran?
El período anual de inscripción para el seguro de salud bajo la Ley de Cuidado de Salud Asequible (ACA) también comienza el sábado, y habrá aumentos significativos en lo que la gente está pagando por la cobertura. Los créditos fiscales mejorados que ayudan a la mayoría de los inscritos a pagar los planes de salud expirarán el próximo año.
Los demócratas desean extender esos créditos y se han negado a votar por un proyecto presupuestal hasta que el Congreso actúe.
Si el Congreso no extiende los créditos, los inscritos subsidiados enfrentarán aumentos de costos de aproximadamente el 114%, o más de $1,000, en promedio, según encontró la organización sin fines de lucro de investigación en atención médica KFF.
En los días previos al inicio de la inscripción al seguro de salud subsidiado, políticos demócratas de todo el país advirtieron que los aumentos de costos afectarían duramente a sus legislados.
En Wisconsin, por ejemplo, las familias en el plan plata de la Ley ACA podrían ver aumentos de primas de $12,500 a $24,500 anualmente, dependiendo de su ubicación. Las parejas de 60 años podrían enfrentar aumentos que van desde $19,900 a $33,150 anualmente.
“No importa cuál sea el porcentaje, es una cantidad enorme”, dijo el gobernador de Wisconsin, el demócrata Tony Evers.
Algunos republicanos en el Congreso han estado abiertos a la idea de extender los subsidios, pero también quieren hacer cambios importantes en la reforma de salud promulgada en la administración del demócrata Barack Obama.
Thune ha ofrecido a los demócratas una votación sobre la extensión de los beneficios, pero no ha garantizado un resultado.
El impacto en los vuelos y controladores aéreos
Los trabajadores federales ya llevan un mes sin recibir un cheque de pago completo, y el desgaste en la fuerza laboral se está mostrando.
Los principales sindicatos que representan a los empleados federales han pedido el fin del cierre, ejerciendo más presión sobre los demócratas para que abandonen sus demandas de atención médica. El presidente del sindicato que representa a los controladores de tráfico aéreo fue el último en instar al Congreso a aprobar una legislación que reabra el gobierno para que los trabajadores federales puedan recibir su pago, y luego los legisladores puedan participar en una negociación bipartidista sobre atención médica.
Nick Daniels, presidente de la Asociación Nacional de Controladores de Tráfico Aéreo, dijo que la tensión financiera y mental están aumentando en la fuerza laboral, “haciéndola menos segura con cada día que pasa del cierre”.


                                    