WASHINGTON.-El presidente Donald Trump ha decidido no permitir que el cierre del gobierno interfiera con una parada en Norfolk, Virginia, este domingo para rendir homenaje a la Marina mientras celebra su 250.º aniversario.
El cierre del gobierno que comenzó el miércoles ha provocado una serie de juegos de culpas partidistas mientras el personal militar trabaja sin paga, varios miles de empleados federales están suspendidos y proyectos clave de infraestructura y energía en áreas gobernadas por demócratas como Nueva York y Chicago han sido puestos en pausa.
Trump acusó a los demócratas en su publicación de permitir el cierre y de intentar “destruir esta maravillosa celebración del cumpleaños de la Marina de los EE. UU.”.
Los demócratas del Senado rechazaron los esfuerzos para mantener la continuidad de las operaciones gubernamentales cuando comenzó el nuevo año fiscal el miércoles. Citaron la interrupción de subsidios que podría provocar un rápido aumento en los costos del seguro de salud para las personas que obtienen cobertura a través de la Ley de Cuidado de Salud Asequible de 2010. Los legisladores demócratas también han intentado revertir los recortes a Medicaid que Trump firmó como ley.
Los demócratas se oponen al movimiento de Trump de hacer que su administración se niegue a gastar fondos aprobados por el Congreso, diciendo que eso socava el proceso presupuestario, entre otras preocupaciones. Mientras tanto, Trump ha explorado la posibilidad de despedir a trabajadores federales en lo que él llamó “Agencias Demócratas”.
Está previsto que se unan a Trump en la Estación Naval de Norfolk la primera dama Melania Trump, el secretario de Defensa Pete Hegseth y el secretario de la Marina John Phelan.
El martes, Trump se dirigió a una reunión de líderes militares convocados abruptamente desde todo el mundo a Virginia por Hegseth. El presidente republicano propuso usar ciudades estadounidenses como campos de entrenamiento para las fuerzas armadas y habló de la necesidad de poderío militar para combatir lo que llamó la “invasión desde dentro”. Hegseth declaró el fin de la cultura “woke” y anunció nuevas directivas para las tropas que incluyen estándares físicos “neutrales en cuanto al género” o al “nivel masculino”.
Trump también ha involucrado a los militares en un conflicto armado con cárteles de droga, lo que ha llevado a cuatro ataques contra embarcaciones en el Caribe que, según Washington, estaban involucradas en el tráfico.
